A200 | Test de Sensibilidad Alimentaria
El test de sensibilidad alimentaria A200 evalúa la respuesta de nuestro sistema inmunoloógico ante a más de 200 alimentos habituales en la dieta mediterránea.
- Necesario acudir a nuestro Centro
- Tipo de Muestra: Sangre
- Resultados en 7 días laborables
La sensibilidad alimentaria se la conoce habitualmente como intolerancia alimentaria, aunque realmente no lo es. Una sensibilidad alimentaria se manifiesta cuando el sistema inmunológico del organismo reacciona negativamente generando anticuerpos IgG contra proteínas específicas presentes en alimentos que consumimos y que nuestro organismo identifica como dañinas, aunque realmente no lo sean. Por su parte, una intolerancia alimentaria es otro concepto distinto ya que, en este caso, se trata de la dificultad del organismo en digerir ciertos alimentos debido, por ejemplo, a la falta de un enzima. Un ejemplo típico de este caso es la intolerancia a lactosa.
Volviendo a la sensibilidad alimentaria, la respuesta inmune producida puede estar vinculada a cambios en la función de la barrera intestinal y manifestarse a través de una variedad de síntomas, incluyendo problemas gastrointestinales, cutáneos, musculares, emocionales, dolores de cabeza y cansancio.
El Test A200 que hacemos en Laboratorio de Análisis Clínicos López Salcedo es una prueba de sensibilidad alimentaria que mide cómo reacciona el sistema inmunológico a una selección de más de 200 alimentos típicos de la dieta mediterránea, pero no mide intolerancias alimentarias.
Este test permite identificar de forma personalizada los alimentos de tu dieta cotidiana que puedes seguir ingiriendo sin problemas y aquellos que sería mejor limitar, evitar o suprimir temporalmente por razones de sensibilidad alimentaria.
El método A200 evalúa directamente los niveles de anticuerpos IgG específicos contra las proteínas alimenticias, ofreciendo un enfoque objetivo. Esto contrasta con otras pruebas del mercado que se basan en métodos de análisis indirectos y menos precisos.
El test A200 para detectar sensibilidades alimenticias se recomienda particularmente para individuos que experimentan los siguientes síntomas sin un diagnóstico claro de su origen o sin haber encontrado alivio con tratamientos médicos convencionales:
- Problemas gastrointestinales como dolor abdominal, inflamación, diarrea o síndrome de intestino irritable.
- Problemas de la piel tales como acné, eczema, urticaria, picazón, psoriasis o erupciones.
- Dolencias neurológicas, incluyendo dolores de cabeza, migrañas, mareos o vértigo.
- Complicaciones respiratorias como tos, bronquitis, asma, rinitis o dificultades para respirar.
- Trastornos psicológicos, que pueden incluir ansiedad, depresión, fatiga o hiperactividad, especialmente en niños.
- Problemas musculo-esqueléticos, como dolor muscular, rigidez, artritis o fibromialgia.
Se desaconseja la realización de este análisis en personas bajo tratamientos que suprimen el sistema inmunológico.
No está aconsejada para mujeres embarazadas, salvo que un médico o especialista lo considere necesario.
No es recomendable para niños menores de 8 años. En casos donde los padres o tutores legales deseen someter a niños menores de 8 años a este análisis, se sugiere que un especialista supervise los resultados.
Importante: Los síntomas asociados a la sensibilidad alimentaria pueden ser poco específicos (como inflamación abdominal, gases, retención de líquidos o problemas dermatológicos) y similares a los de otras enfermedades o patologías. Es importante asegurarse de que las molestias se deben a una sensibilidad alimentaria y no otra enefermedad. En caso de duda, se recomienda consultar a un médico.
- Es necesario acudir a nuestro laboratorio para poder realizar este test.
- Igualmente, se requiere estar en ayunas durante al menos 4 horas antes de la toma de la muestra.